Ya hacía tiempo que queríamos hacer unas fotos a Mónica y Tara, que son inseparables. Pero para hacer fotos a animales, ellos deben de querer, si no estamos perdidos y vale la pena dejarlo para otro día. Para facilitarlo decidimos hacerlas en casa, donde Tara se siente más tranquila y podemos pedirle más cosas sin que llegue a agobiarse de la cámara , flash, trípode, reflector... Y si encima está con sus dueños, pues ayuda y bastante. Aún así, es imposible saber cómo va a responder una perra a una sesión de fotos. Fue una sorpresa la "facilidad" y "naturalidad" para posar que nos demostró Tara, ¡parecía que sabía lo que queríamos!
Ahí va el resultado...
Ahí va el resultado...